CAFE, Comparative Aircraft Flight Efficiency, organiza una competición financiada por la NASA denominada Green Flight Challenge. Eso no significa que los aviones participantes estén pintados de color verde, sino que las naves tendrán que ser capaces de recorrer 200 millas en menos de dos horas y empleando la energía equivalente a menos de 1 galón de gasolina por ocupante. Los combustibles pueden ser gasolina, bio-diesel, hidrógeno y electricidad. La competición se llevará a cabo en Arizona entre el 11 y 17 de julio.
No existen tantos aspirantes, concretamente solo hay 13 aceptados. El primero de ellos es el avión diseñado por los alemanes de la empresa PC-Aero y su modelo es el Elektra One, avión totalmente eléctrico. En el siguiente vídeo (en alemán) se puede ver cómo se montó este avión y al final, la prueba de que es capaz de volar. Obviamente, el diseño de estos aviones es distinto al de los aviones comerciales, y el rasgo más característico de su poco consumo es la silueta afilada del fuselaje y las grandes alas, típicas de los planeadores.
La necesidad de este tipo de tecnologías es grande, ya que el pasado martes se publicó un estudio en el que se asegura que las líneas de humo blancas de los aviones, en un día cualquiera, calientan el planeta más que el dióxido de carbono desprendido en toda la historia de la aviación desde 1903.
Esas líneas blancas no son 100% contaminación y dependen de la humedad del cielo, temperatura y otros factores, tal y como se explica en aerotool.
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